¿Sufrís maltrato en tu trabajo? 7 señales que podrían indicar acoso laboral
¿Te sentís constantemente desvalorizado en tu trabajo? ¿Volvés a casa angustiado, sin ganas de volver al otro día? Tal vez estés atravesando una forma silenciosa de violencia psicológica que muchos desconocen: el acoso laboral o mobbing.
En este artículo te ayudo a identificar las señales más comunes y qué podés hacer si te sentís reflejado.
¿Qué es el acoso laboral?
El acoso laboral, también conocido como mobbing, es una forma de violencia psicológica que ocurre en el ámbito del trabajo. Puede incluir humillaciones, aislamiento, amenazas sutiles, sobrecarga intencional de tareas o degradación de funciones.
A diferencia de los conflictos ocasionales, el acoso laboral es sistemático, sostenido en el tiempo y tiene como objetivo desgastarte emocionalmente.
7 señales de que podrías estar sufriendo acoso laboral
✅ 1. Sos constantemente descalificado o ridiculizado
Comentarios irónicos, burlas o críticas destructivas en público pueden parecer “chistes” pero son formas de violencia encubierta.
✅ 2. Te excluyen de reuniones o decisiones
El aislamiento es una técnica común de acoso: se evita que participes o que estés informado. También pueden mandarte a trabajar solo.
✅ 3. Te asignan tareas humillantes o sin sentido
Puede ser una forma de menospreciar tus capacidades o anular tu rol profesional.
✅ 4. Sentís miedo o ansiedad al llegar al trabajo
Tu cuerpo te habla antes que tu mente: tensión muscular, insomnio, llanto sin razón aparente.
✅ 5. Sos víctima de rumores o difamaciones
Se instala una imagen negativa sobre vos que daña tu reputación frente a otros.
✅ 6. Te exigen resultados imposibles o plazos irreales
La sobrecarga como castigo, diseñada para hacerte fallar.
✅ 7. Dudás de tu valor personal y profesional
Es el efecto más devastador: llegás a creer que “el problema sos vos”.
¿Qué consecuencias puede tener el mobbing en tu salud mental?
Depresión o desgano
Baja autoestima
Trastornos del sueño
Sentimientos de inutilidad o culpa
Síntomas físicos como gastritis, dolores musculares, fatiga
👉 No estás exagerando. Estas reacciones son reales y legítimas.
¿Qué podés hacer si te sentís identificado?
Reconocé lo que estás viviendo. Ponerle nombre es el primer paso.
Documentá lo que ocurre. Guardá mails, mensajes, anotaciones.
Buscá apoyo profesional. No tenés que atravesar esto solo/a.
No minimices tus síntomas. Tu cuerpo y tu mente te están hablando.
¿Querés empezar a estar mejor? Estoy para acompañarte.
Si sentís que este artículo habla de vos, si algo en tu interior hace clic, quizás sea momento de dar un paso más.
Desde la psicoterapia, podemos trabajar juntos para:
Comprender lo que viviste
Sanar las heridas emocionales
Recuperar tu autoestima
Aprender a poner límites sanos
Volver a conectar con tu bienestar